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martes, 7 de mayo de 2013

España, la hipocresía del Partido Popular: clama por austeridad pero subía sueldos a imputados por corrupción

El Partido Popular, ya lleva años que mantiene una actitud con sus propios funcionarios, diferente al discurso que propone para el resto de los españoles, eso sin perder ni un segundo de sueño por su falta de ética con aquellos que le votaron, y con todo el pueblo español.
El Partido Popular que presume de contundencia frente a la corrupción, mantiene actitudes que no reflejan esa ejemplaridad y transparecia que se supone quiere imponer, quizás en otros, pero no en ellos mismos. Así parece desmostrarlo su comportamiento con algunos imputados del caso Gürtel. No sólo no apartó del partido a los presuntos corruptos sino que les aumentó sus retribuciones. Por ejemplo, dos de los implicados en esta trama de corrupción, el que fuera eurodiputado Gerardo Galeote y el exalcalde de Pozuelo de Alarcón (Madrid) y exmarido de Ana Mato, Jesús Sepúlveda. Ambos vieron incrementar su sueldo más del 40% entre 2009 y 2011, precisamente después de que estallara el caso Gürtel.
Según publica este martes el periódico El País, a partir de las cuentas oficiales del PP en manos del juez Pablo Ruz, el partido incrementó el salario de Gerardo Galeote en un 76% en el periodo señalado, de 86.016 a 151.834 euros.
Los datos son espeluznantes. Más allá de las sospechas de corrupción, estos dos trabajadores cobraron del PP (sostenido con fondos públicos) en plena crisis sueldos millonarios: unos 300.000 euros se embolsó Sepúlveda y casi 400.000 Galeote entre 2009 y 2011. Pero, independientemente, de los altos sueldos, que quizás estén basados en principios de rentabilidad y retorno de su trabajo, lo que contrasta con el discurso del señor Rajoy, es el porcentaje de aumento, cuando ha estado defendiendo para el resto de los trabajadores españoles la necesidad de austeridad, de cerrar las cuentas, de eliminar ayudas sociales, de privatizar la sanidad, de suprimir subvenciones a los millones de desempleados, etc.
Según la investigación policial del caso Gürtel, Galeote pudo cobrar de los cabecillas de la trama corrupta 628.310 euros. La Policía se basó en extractos de cuentas bancarias de 2009 del exeurodiputado con ingresos en florines en entidades como Credit Lyonnais con sumas de 162.000 euros, compra de un coche de lujo y reservas de apartamentos por 6.000 euros.
Si nos atenemos a criterios empresariales el retorno del trabajo del señor Galeote debe ser de gran importancia para el desarrollo de España, dada la importancia de su retribución con fondos públicos. Pero lo curioso, según informa El País, es que "Aunque Gerardo Galeote se libró de ser encausado, el escándalo le pasó factura. El que había sido número tres del PP en las listas de las elecciones europeas en 2004 y presidente del comité para el Desarrollo Regional de la UE, desapareció de la vida política. Sin embargo, y a pesar de no desempeñar funciones de relevancia, en 2011 recibió el tercer mayor sueldo de la formación conservadora, por detrás de Mariano Rajoy (200.628 euros), y José Manuel Romay Beccaría (165.228), excluidos los 251.638 euros del finiquito en diferido de su extesorero, Luis Bárcenas. Internamente figura como asesor de Rajoy para asuntos europeos y cuenta con un despacho en la sede del partido de la calle Génova, adonde acude con asiduidad". 
Otro de los beneficiados de una retribución creciente fue Jesús Sepúlveda, exalcalde de Pozuelo de Alarcón (Madrid), ex marido de la ministra de Sanidad, e imputado también en el caso Gürtel.
Sepúlveda observó agradecido como en el período de 2009 a 2011 su salario del partido creció en un 40%, de 84.065 a 117.049 euros, mientras millones de españoles los tenían estabilizados o lo habían perdido como consecuencia de una nefasta gestión gubernamental. Quizás debido a la gratificación variable que suelen dar algunas empresas a la eficiencia y productividad en el trabajo, en este caso a mayor corrupción mayor retribución.
El sueldo del señor Sepúlveda está entre los 10 más altos de la cúpula del Partido Popular, a pesar de estar acusado de cohecho e investigado por fraude fiscal. Esa organización decidió premiar a Jesús Sepúlveda por los "servicios" prestados.
Obligado a dimitir de su cargo en el partido en 2009, siguió cobrando del PP por trabajos de asesoría. Y sólo fue apartado de la organización cuando estalló el escándalo, según anunció María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP, hace unos meses. "El señor Sepúlveda ha dejado de prestar servicios en el PP a partir de hoy", anunciaba Cospedal en una comparecencia de prensa en la sede central del partido en Madrid el día 11 de febrero. La misma terminó con una indemnización por despido improcedente de 229.000 euros.
Según investigaciones en curso el ex alcalde de Pozuelo de Alarcón, recibió más de medio millón de euros en comisiones entre 2002 y 2004 por adjudicaciones presuntamente irregulares del citado ayuntamiento madrileño, además de regalos, como vehículos, fiestas familiares y viajes.
Lo dicho el aumento es el premio a la rentabilidad de sus funciones.
El País ha destapado esta información el mismo día que la Unidad de Delitos Económicos y Financieros (UDEF) ha declarado en su informe sobre los denominados papeles de Bárcenas, "Se observa una actuación (del PP) persistente en el tiempo consistente en transformar donaciones nominales por encima del límite legal en ingresos en la cuenta de donativos anónimos, dividiendo la cuantía en múltiples partes por valor inferior, con lo que es imposible verificar si se incumplen los límites máximos de aportación".
El documento, de más de 130 folios y cinco anexos, confirma que el Partido Popular, a través de la figura de su ex tesorero, Luis Bárcenas, vulneró, supuestamente, la Ley de Financiación de Partidos Políticos al ingresar en una cuenta especial del Banco de Vitoria (posteriormente Banesto) donaciones irregulares "troceadas en pequeñas cantidades" para evitar, de esa manera, que superasen el tope legal de los 60.000 euros, y dificultar, o esquivar, así el trabajo fiscalizador del Tribunal de Cuentas.
Según publica El País en su página web, respecto a este tema, "la policía propone al juez que indague las adjudicaciones de obras recibidas por empresas vinculadas" a varios empresarios entre los que se encuentran "Joaquín Molpeceres (Licuas y Desprosa) o Ignacio Javier López de Hierro Bravo (Metrovacesa y Constructora Continental). López de Hierro es el marido de la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal"

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